Cabe mencionar que en la entidad ello sienta un precedente de suma importancia por el esfuerzo e interés de la sección sindical del DIFEM, IMIEM y JAPEM ante el SUTEYM, y su titular, Gabriela Estrada Velázquez, por promover este tema no sólo en el ámbito laboral, sino en las familias y comunidades de las mujeres trabajadoras, a fin de facilitar el acceso a condiciones de igualdad en todos los ámbitos de la vida.
En este sentido la especialista ejemplificó que" algunas creencias históricas como pensar que el hombre es el sexo fuerte y la mujer el sexo débil, han limitado el desarrollo de ambos, creando formas de dominio, relaciones violentas y segregaciones, lo cual es definitivamente inadmisible".
Para lograr la igualdad de oportunidades y desarrollo entre hombres y mujeres, aseguró que la clave de este asunto es el trato que recibe este sector de la población, ya que la discriminación se da sólo por cuestión de género, es decir, sufren la marginación o negación de sus derechos y libertades.
Advirtió que importantes documentos como la Convención Sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer, y la Convención Belem do Pará, representan importantes avances internacionales en la materia; sin embargo, en muchos casos las mujeres siguen sufriendo desigualdad, violencia y discriminación, por lo que es necesario que transformen las ideas que históricamente han frenado su desarrollo.
En este sentido, la conferencista dijo que es necesario empoderar a las mujeres para que tomen las riendas de su vida, a través de decisiones sobre su propio desarrollo, en igualdad y libertad, a dirigir sus vidas sin el sometimiento al padre, marido, hermanos, hijos, e incluso, a veces de la propia madre, lo cual provoca que no se dediquen a sí mismas, concluyó.
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